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El caso de las liebres muertas
Un grupo de amigos, Olivia, Lucio, Rolando, Ema y Román, van a visitar al secretario de Medio Ambiente de la Municipalidad porque el río cercano está contaminado. El secretario relata en primera persona cómo odia a los chicos y su intromisión en asuntos que no le competen. Los chicos deciden investigar por su cuenta y para ello se valen del Google Earth, internet, poner una cámara oculta, hacer persecuciones en bicicleta, la autopsia a una liebre, de entrevistas periodísticas, en fin, todo lo necesario para descubrir qué sucede.
Una novela atrapante, donde un personaje “malo” cuenta la contracara de la historia, con intriga detectivesca, un romance entre chicos que no cae en lugares comunes, y un “relato dentro del relato” que le da una vuelta de tuerca a la historia: los chicos piensan escribir una novela en capítulos que es esa que el lector está leyendo.
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